24 de diciembre de 2013

¡Viva Diomedes, muerto o vivo pero que viva! V1,0

*Las letras las escribí de memoria que pena si hay errores.

Dijo Diomedes “Compadre Juancho no fui a su entierro porque no quise verlo enterrar” algunos se acordarán de aquella fatídica despedida y de las circunstancias que la acompañaron.


Hoy me pasa algo parecido, no quiero saber nada de la muerte de Diomedes creo que es porque en el fondo no quiero que muera y como lo dijo un amigo “quedan sus canciones”. Diomedes para mi es el único ídolo, para mi no hay ni habrá más ídolos en mi vida porque las circunstancias cambian tan rápido como uno lo hace, sin duda alguna el Cacique de La Junta logró cosas increíbles en mi como que yo aceptara que tenía un ídolo y que actuara como un fiel seguidor, logró también que lo esperara por horas hasta las cuatro o cinco de la mañana solo para estar seguro de que no llegaría y en los casos que llegó para celebrar la pobre y desprolija interpretación porque definitivamente en tarima era un gran ronroneador de canciones, en muchas ocasiones su avanzado estado de emparrandamiento le impedía si quiera tararear. Y qué, era Diomedes.

Pensé comenzar con explicar lo que yo veía en Diomedes y me hacía seguirlo pero mejor voy a comenzar por hablar de lo que, a los que no eran sus seguidores, les producía Diomedes  y con eso los libero de tener el peso de leer cosas buenas mientras sus entrañas se retuercen diciendo “yo no puedo creer que lo defienda si es…”

Capitulo 1
Tras de machista…

Como los que lo juzgaron son intelectuales, libres pensadores pero sobre todo personas cultas y de bien que a mi juicio solo tienen un solo defecto, creerse dios, y por lo tanto cuentan con el derecho divino de decir quienes se van al cielo y quienes nos vamos al infierno voy a comenzar por los “pecados” de Diomedes.

Diomedes en sus letras decía que “el ser mujeriego y el ser parrandero creo que no es pecado ni delito nunca” yo eso lo comparto, así como también declaró “mujeriando toda la vida viviré” o algo más inteligente como “estoy pensando en montar una sociedad con toditas mis mujeres para que no me frieguen más” y en el fondo él sabía que esto que no creía que fuera un pecado, si lo era, de ahí que más adelante hizo referencia a lo pecaminoso que pudo llegar a ser  “Si me hubiera metido a cura más grande seria mi pecado porque así con sotana y todo mas de una me hubiera llevado” y el “llevado” es a la una cama y no a dormir. Para mi ídolo “la mujer que no da na’ entonces no sirve pa’ na’” en alusión clara y expresa a la necesidad de tener intimidad, sexo “porque eso de abrazos y besos es pa’ los pela’os”.

Me pregunto ¿el gusto desenfrenado por las mujeres es un pecado?, lo que no estaría bien sería engañar ¿creen que Diomedes engañó a alguna mujer diciéndole que él era un hombre fiel?. En el post que titulé ¡Qué vivía Diomedes!  hace hoy exactamente 4 años y 8 meses  donde incluí el video de uno de los reportajes que Ernesto McCausland le hizo a Diomedes en este el tema especifico era la muerte, Diomedes cuenta de cómo se imaginaba su entierro decía que iban a estar por ahí como doce viudas.

Es fácil concluir que Diomedes era orgullosamente mujeriego y casi que se ufanaba de eso. Hoy el ménage à trois ha perdido caché pero tuvo su estatus ahora se llama simplemente trio, los swingers son elementales intercambiadores de parejas y con el tiempo se han ido incluyendo conceptos como heteroflexible o bicurioso que le permiten a los jueces de la moral ser un poco laxos antes de decir que alguien es gay, dicho de otra manera hoy en día uno puede ser marica por raticos sin necesidad de ser señalado como homosexual. Entonces lo que le juzgaban a Diomedes era el machismo y lo que se pretendía, entendería uno, es que mantuviera a todas sus mujeres en un mismo espacio físico pero que bajo ninguna circunstancia las mantuviera por separado con casa y camioneta. Con el propósito de que entre ellas pudieran tener juego sexuales y así, estos jueces divinos, le quitarían el rotulo de “corroncho machista” a lo transformarían en un “ excéntrico open mind”.

Lo que suena en un idioma extranjero es una práctica respetable, aunque el que juzga lo hace con todo y para todo, por lo que no lo digieren con tanta facilidad pero les da pena aceptarlo para que no los tilden de corronchos, sin embargo cuando la palabra es en español les produce nauseas. Comparar un mujeriego con un swinger es posible, aunque un mujeriego no es más que un hombre con muchas relaciones sexo-afectivas no interrelacionadas sin duda no es una práctica sexual sino social y de serlo sería catalogada como soft, pero un swinger tiene una práctica sexual que involucra más personas que su pareja, donde la puede o no compartir, pero por regla ella estará desnuda y presente, en algo que quizá para el fácil entendimiento de todos no sería nada más que una orgía. Entonces el protagonista  de estas prácticas sexuales no es tachado de nada solo por el hecho de que su hobby tiene una "filosofía" que lo "respalda" con un sonoro nombre en inglés y algunas reglas de participación, al él jugar golf, vivir en un loft  y tener estas prácticas con los amigos del club logra cerrar el circulo que lo cataloga como un tipo play de mente abierta, claramente si lo comparan con un cantante popular que luce un diente con un diamante incrustado y que anda con unas niña de pueblo terminamos comparando un whisky con un guarapo ¿cuál será menos dañino?.

Ahora bien,  si me preguntan, qué si yo quisiera que mi hija se fuera a vivir con un hombre de estas características  y estilo de vida, la respuesta claramente es no. Porque uno no seguía al hombre sino al artista en otras palabras la admiración era por su carrera musical y obviamente no por su vida personal la cual, sin duda, le hizo mucho daño a su profesión. En Diomedes lo que se lograba encontrar era un un derroche de vacíele (humor), talento, genialidad y sabiduría popular. Estaba muy lejos de ser perfecto, tanto así que su peor error terminó llevando su carrera al ocaso. Para los jueces divinos él no era más que un criminal para mi es un artista que cometió un delito bajo unas circunstancias que de ninguna manara lo excusan. Quizá mi problema es que pienso que cualquiera puede caer en el error de llevar las cosas a los limites y cuando eso es así cualquier pequeño movimiento hace que un momento de diversión termine en tragedia. Alguien me preguntó justamente hoy
- ¿Qué se siente cuando uno va a 200 kms/hr. en una moto? ¿se siente extasiado?
-  Se siente un miedo absurdo -mi respuesta fue contundente-.
- ¿Por qué lo hace entonces?
- Por huevon -le dije mientras pensaba en lo frágiles que somos-
- ¿No hay riesgo?
- Claro a esa velocidad solo hay riesgos porque si una persona distraída que va en sentido contrario por esquivar un hueco invade mi carril me mata.
- ¿Tiene sentido entonces ir a 200 kms/hr.?
- No.
Así terminó la conversación pero ahora me pregunto, ¿tiene la culpa el señor distraído que esquiva el hueco y me mata? claro que la respuesta es si. Ese es mi ejemplo, un ambiente sórdido, dos guardaespaldas, una mujer embarazada, una acompañante y todo esto entorno al consumo de cocaína donde los estados se alteran y más aún cuando hay una mujer con las hormonas revueltas, esto creo que configuró las circunstancias necesarias para que allí sucediera una tragedia pero como yo no estuve ahí no me atrevo a lanzar un juicio en ningún sentido.

Capitulo 2
Por la reivindicación del ídolo

Pensar que Diomedes era genial a muchos no les cabe en la cabeza, sin embargo hay un ejercicio fácil que demuestra el pensamiento lateral del Cacique y su capacidad para responder lo que pensaba más allá de los prejuicios y esquemas mentales básicos de nosotros los que somos estandar. Cuando en la entrevista con MacCausland, a la que hice referencia en el capitulo anterior, le preguntan ¿Cómo le gustaría morirse? él no respondió como respondería la mayoría,  con frases como: de viejo, durmiendo, de un infarto, etc., contestó lo lógico “de ninguna forma, a mi no me gustaría morir ni viejo,” es que a quién demonios se le ocurre que a uno le “gustaría” morirse, el gusto por la muerte propia sería un fetiche suicida pero Diomedes lo supo resolver sin pretensión alguna y esto para mi eso es una demostración de cómo piensa un genio porque piensa diferente y porque logra cosas que el común no logramos hacer por básicas que parezcan.

Cuando dice en el video que la gente piensa que él está loco, es cierto, la gran mayoría está convencida de que todo lo que dice es en serio que él, realmente piensa, que "con estos calores" la tumba no es difícil de sobrellevar y es ahí donde se equivocaron siempre.

Diomedes no todo lo que cantó lo compuso pero lo interpretó de una forma que logró transmitir sentimientos y marcar momentos importantes en nuestras vidas. Hace más de 20 años en el Regreso del Cóndor una canción titulada El Verdadero Culpable marcó el nacimiento de los vallenatos de Diomedes en mi vida y paradojicamente creció entorno a la muerte “Yo no pude creer que tuvieras tenido que partir, ¿dónde está la razón?, el secreto murió con tu adiós, no hubo tiempo de gritar me atraganto con mi confesión, ¿tanto amor para qué? si entregaste tu vida a un don Juan. ¿Dónde estará el verdadero culpable de un destino tan cruel? Yo sufría tanto al mirarte entregada y él se reía de ti, yo no podía ni siquiera decirte el te va hacer morir y ahora que vives en mi pensamiento no puedes comprender. Yo no te olvido te llevo siempre, vives conmigo aquí en mi mente”.

Amar en silencio, saber que ella se murió sin haberle podido declarar su amor y resignarse a vivir con los recuerdos de lo que nunca fue, es algo difícil de entender pero más difícil es encontrarlo en palabras tan precisas que transmiten ese dolor tan fuerte. Esa canción logra producir en mi una nostalgia mayor a la que produce el sikuri que marca la melodía del Cóndor Pasa.

Creo que esto ayuda a entender que la afinidad no es por compartir la vida personal sino por lo que lograba transmitir no solo con las letras sino con la voz.

Y los más ilustrados que entienden el concepto del devenir creo que nunca lo hubieran podido expresar también como lo hizo Diomedes en Mi muchacho cuando dice “por eso es que la vida es un baile que con el tiempo damos la vuelta, pero el tiempo acaba la fiesta y…”, quizá cualquier motivador de hoy le gustaría explicar y dar ejemplo a algo que  el Cacique resumió con maestría “Yo vivo mi vida y otro que la sufra porque con lamentos no se gana nada, por eso no para bolas a los cuentos callejeros aunque la gente critique mi vida desordenada” eso es lo que hoy definen como buscar la felicidad, declarar los sueños y no escuchar a los asesinos de ellos.

Para no seguir con frases con trasfondos filosóficos podría mencionar algunos apartes de canciones que definen  principios básicos de las relaciones amorosas, en la canción Cristina Isabel (Tres Canciones 1977) de eso ya 36 años hay una frase que dice “Esté segura Cristina Isabel esa morena de Montería que yo la quiero más cada día y estoy seguro me quiere también porque soy hombre que sabe querer con gran firmeza y sin hipocresía” es la corresponsabilidad basada en el dar y seguramente coincidiría con un budista en que esto es un ejemplo de Karma. El amor expresado en frases simples “perdóneme señorita sin en algo llego a ofenderla pero es que usted es tan bonita que no me canso de verla” “yo no la olvido un momento yo creo que usted me ha embrujado y estoy tan enamorado que la sueño hasta despierto” La Juntera (Para mi Fanaticada 1980) creo que no hay algo más respetuoso que pensar que se ofende por mirar  y admirar cuando hoy las miradas son lesivas, algunos se escudan argumentando que son causadas por los excesos de silicona.

Encontramos el hombre machista claro, pero así como el hombre reflexivo y sensible en cada momento “Cuna qué destino te ha tocado 
eres un poema de tristeza 
eres como un niño regañado 
que sólo llorando se consuela” Cuna Pobre (26 de mayo 1994)  y así me quedaría tratando de hablar de cada una de las canciones y de hablar de un hombre despechado que no despotrica de la mujer que le falló, como hoy lo hacen los de la nueva ola, decir “Aquí están tus canciones, tira mis ilusiones lejos muy lejos de mi porque han de nombrarte porque han de matarme si las dejas al partir”  y luego “Ella se ve linda con el pelo largo y el traje blanco que me mata a mi, dime tu que hacer con tantas ilusiones y la canciones que escribí por ti”  y reconocer que los hombres lloramos “Por verme mil temores 
cantando tus canciones 
triste triste te pondrás 
verás llorar a un hombre 
y pa’ que un hombre llore 
algo grande ha de pasar“Aquí están tus Canciones (El Cóndor Herido 1989) esta es un expresión decente de manifestar el dolor sin ofender, sin denigrar y reconociendo que la sigue viendo linda.

Capitulo 3
Lo que significó en mi vida

Hoy recuerdo con nostalgia ese pasacintas (ya no existen) autoreversible en el cual siempre había un casete de Diomedes que nunca paraba, montarse conmigo en el carro significaba tenerse que aguantar (para el que no le gustaba) el casete que duraba, de noviembre a noviembre, hasta que Diomedes sacaba su siguiente LP. Luego cuando finalizaban los 90 el CD mejoró la dinámica hasta el punto en que esta nueva tecnología me permitía con facilidad definir que una canción se repitiera eternamente, la misma canción El Cóndor Herido que comienza con una dedicatoria “Con mucho cariño para mi compadre Santi” y bebiendo con mis amigos pasaban y pasaban las botellas pero en mi carro solo sonaba El Cóndor Herido como diríamos los corronchos “A todo full”. Pero la pesadilla no terminaba ahí, ir a mi casa a parrandear era la desgracias de las niñas para ser exacto de las pelaítas,  solo CDs y LPs de Diomedes que cuando me amenazaban con cambiarlos para descansar de esa sobre dosis yo gritaba “¡No joda, déjalo correr!” porque para mi no había una canción mala y aunque siempre dudamos de que eso se debía a daños colaterales causados por la excesiva ingesta de ron (léase trago) hoy me doy cuenta que no era así, definitivamente no había canción mala.

Cuando llegué a Bogotá hace más de una década me di cuenta de que acá las dos únicas canciones que la gente identificaba del Cacique eran La Plata y Caracoles de Colores la cual en las discotecas bailaban hombres y mujeres curiosamente en una especie de cumbia transgenero, ellas movían las polleras imaginarias mientras ellos llevaban las velas en reemplazo del sombrero y el machete eso me hizo entender el porqué por esto lares Diomedes no era mas que un corroncho y un delincuente porque letras como la de Bajo El Palmar (Todo es para Ti 1982) les resultan imposibles de digerir porque creen que el vallenato es para "recochar" y en la práctica ritmos tranquilos y letras complejas les impiden hacer un trencito en una fiesta familiar,  así las cosas la mayoría de su discografía se quedó sin la posibilidad de se exportada al frío capitalino impidiendo realmente que la mayoría de los cultos capitalinos lograran llegar a saber porque Diomedes es un ídolo inmortal.


Finalmente el sueño no se me cumplió, en aquellas épocas a principios de los noventa yo decía, si me gano la 9 Millonaria (la lotería de la época) la cual nunca compraba -porque no podía gastarme la plata del ron en maricadas- compro una casa con piscina la lleno de Sello Negro (Johnnie Walker empresa que creía podía ir comprando de a botella) y contratamos a Diomedes para que cante hasta que acabemos de bebernos la piscina o nos acabemos nosotros.

Diomedes también me hizo pensar que “El ser parrandero y el ser mujeriego” era un estilo de vida, lo intenté claramente pero fui un fracaso, la falta de éxito con las mujeres así como la falta de plata me hicieron apartarme del camino señalado por el maestro, yo nunca logré tener más de una.

La vida cambió,  hoy en día dura más el guayabo que la parranda y cuando esa relación llega a la vida es "sejuela" (se jué la juventú) no hay como seguir parrandendo como coprofesión. Lo único vivo de ese pasado que quedaba era El Cacique de la Junta, esta es una despedida no solo al Cacique sino a ese pasado que recorrimos con su música entre billares, esquinas, bordillos, playa, botellas de ron, fritos, butifarras, perros (solo milenio porque era a mil barritas) y pelaitas, ya mucho más de una década nos alejaba y el último eslabón se fue para el cielo.

Lo único que le digo compadre Diomedes en su despedida es que antes de entrar a ese mundo celestial cerciore de que le garanticen ron, parranda y mujer sino devuélvase que acá algo hacemos.