Con todas las herramientas que hoy existen para acceder a la información pienso que es injustificable no conocer nuestra historia reciente, me refiero a lo que ha sucedido en Colombia durante los últimos 15 años.
Quizá los que tienen entre 18 y 27 años se consideran eximidos de saber lo que pasaba en Colombia hace 15 años o menos y se sienten con toda la propiedad para hablar de política. Pienso que para hablar de política se debería recurrir un poco a la historia para entender los antecedentes que finalmente fueron determinantes para estar en esta situación socio-política.
La decisión de ser o no uribista la define cada quien, eso es un tema. Otro tema es que tan positiva o negativa ha sido la gestión de Uribe comparada con sus antecesores, partamos desde el 7 de agosto de 1958 con el frente nacional, comenzando con Alberto Lleras Camargo, insigne liberal quien todavía por muchos es considerado como el mejor presidente de la historia reciente de Colombia, aunque medio siglo no sea tan reciente. Y el último tema es la conveniencia o no de una segunda reelección de Uribe.
Con relación a los dos primeros temas se los dejo de tarea en casa, estudien y concluyan, les recuerdo los más recientes presidentes, es decir, de los que me acuerdo así fuera muy niño: Turbay, Betancur, Barco, Gaviria, Samper, Pastrana y Uribe y con respecto al tercer tema la conclusión es que es inconveniente según mi punto de vista, lo que pasa es que quise hacer la diferenciación porque es común ver en algunos Blogs una amalgama bastante tropical donde mezclan de manera exótica estos temas como si fueran lo mismo, los quise identificar para ayudarles a pensar con un poco más de orden.
Pero ahora el tema en boca de todos se basa en lo infame e inhumano que es Uribe y para argumentar esto se basan en su inflexible posición frente a la guerrilla con respecto al intercambio humanitario, porque sin lugar a dudas para todos han sido desgarradoras las imágenes que hemos podido ver de los soldados secuestrados y torturados.
Ahí comienza mi indignación, primero porque para mí los únicos culpables son los secuestradores, estás personas fueron plagiadas antes del gobierno de Uribe y los antecedentes de la guerrilla en términos de diálogos de paz y negociaciones son nefastos, la pregunta es ¿cómo creerles?. Lo segundo que se me ocurre pensar, es que si al ceder ante un chantaje basado en un secuestro, se estará legitimando el secuestro como una herramienta valida por parte de los terroristas. Es decir, mañana estos delincuentes que no tienen nada de humanos, al verse sin herramientas de presión volverán a secuestrar y simplemente lo que hacen es tomarse un aire.
Pero bueno, las anteriores son solo reflexiones, el tema importante es explicarle a los intelectuales que juzgan a los uribistas como simples idiotas ignorantes, el por qué son uribistas y quizá darles algunos elementos de juicio que les ayuden a mirar por donde puede ir más bien esa ignorancia en este país.
Para eso considero fundamental partir del hecho de que yo no soy uribista y que además no considero conveniente la segunda reelección de Uribe como lo mencioné anteriormente. Pero tampoco creo que los que son uribistas sean unos estúpidos, como muchos lo quieren hacer creer, los uribistas lo son porque Uribe ha cumplido los sueños y deseos de la mayoría de colombianos, lo que pasa es que como no tenemos memoria, o edad, o juicio para informarnos, creemos que Uribe es un loco furioso que se ensaño con los pobres revolucionarios de este país.
Pero como no quiero caer en la misma dinámica que le encanta a muchos blogueros, es decir, esa de hacer señalamientos apasionados, esa de lanzar improperios y falacias para argumentar, les envío este link Sentida Marcha Contra el Secuestro, este artículo es del 2 de Diciembre de 1996.
De manera general para los que no les gusta leer les voy a extraer apartes de lo que dice este artículo, lo cual refleja cómo era nuestra realidad hace cerca de 13 años:
• La amenaza de las fuerzas oscuras que hicieron explotar un petardo en inmediaciones del Parque Nacional no pudo contener el río humano que se tomó la carrera Séptima hasta inundar la Plaza de Bolívar para gritar con el alma no al secuestro.
• Aquí no hay amenaza que valga. La protesta es ahora o nunca, porque de lo contrario llegará el día que nos secuestren a todos, dijo una madre que lleva dos años esperando el regreso de su hija.
• La Séptima parecía un álbum abierto con los rostros de Justino, Ricardo, Johana, Margarita, John, Rodrigo, Andrea, Camilo, Lucía, María... que todos querían mostrar para que Colombia y el mundo recordaran que en los últimos 11 meses fueron secuestradas 931 personas, de las cuales 111 son niños.
• A veces siento que el cansancio me vence, pero la memoria de mi hijo me recuerda que no puedo morirme sin volver a abrazarlo.
• No a la indiferencia, tomemos conciencia , nuestro patria está herida por la falta de nuestros soldados secuestrados , rompamos las cadenas del secuestro ...
• La rabia se apoderó de muchos de los manifestantes que gritaron sin cesar: secuestradores al paredón , pena de muerte a secuestradores ...
• Lizarazo pidió cordura y el sacerdote pidió orar por los que nos odian o nos maltratan. Y luego Nidia Quintero de Balcázar hizo estremecer la Plaza cuando recordó el secuestro y el posterior asesinato de su hija Diana.
• Pacho Santos dijo que este sólo era el principio de la lucha contra este flagelo e invitó a la guerrilla, los paramilitares y al Gobierno a sentarse en la mesa de negociación para humanizar la guerra.
Entonces ¿qué podemos concluir?, pues que Uribe representa el sentir del pueblo, ese que en 1996 pedía pena de muerte para los secuestradores, ese que lloraba sus muertos, esos muertos como Diana Turbay que fueron primero víctimas del secuestro. Este país está lleno de victimas y la gran mayoría son víctimas de la guerrilla, de sus atentados terroristas, de sus secuestros y posteriores asesinatos.
Y ahora salen algunos inconscientes sin memoria, a decir que los que apoyan a uribe en su posición frente a negociar con la guerrilla son unos inhumanos que no sienten el dolor de tener un familiar secuestrado. Valiente estupidez esa, los “furibistas” no son inhumanos, no es que no sienten el dolor de los secuestrados, todo lo contario son los que sienten el dolor de haber perdido a sus seres queridos durante décadas, son los que lloraron durante años, hoy hablan de 26 militares secuestrados y se olvidan de que en los primeros 11 meses de 1996 fueron secuestradas 936 personas, esas que sobrevivieron y sus familias son parte de los furibistas y las juventudes furibistas nacen de esos 111 niños que fueron secuestrados en ese año.
Uribe también ha sido víctima, aunque suene chistoso para muchos sin memoria y utilizando el mismo método barato de los intelectuales les devuelvo la pregunta, ¿cómo sería su posición para negociar con la guerrilla si a su papá se lo hubieran matado ellos?. Francisco Santos, también víctima del flagelo del secuestro, en aquel entonces propuso humanizar la guerra y ¿qué pasó con Santos?, ¿Por qué ahora tan beligerante?, para los que no se acuerdan de la historia, porque cualquier diálogo de paz que se trato de hacer con la guerrilla fue infructuoso, me voy a permitir usar esta frase para describirlo mejor, siempre que quisimos dialogar de paz con la guerrilla, ¡La guerrilla nos cogió el CULO!, tampoco se acuerdan de qué paso en y con el Caguan. Esa historia se la recomiendo que la lean, porque no se las voy a contar. Pero como anécdota simpática de aquella época esta la frase que pronuncio Tirofijo a un grupo de periodistas que intentaron obtener unas palabras del delincuente, mientras abordaba su camioneta Toyota robada en una de esa calurosas tardes en El Caguan, “bueno se les está haciendo tarde y esto por acá está lleno de guerrilla”, burlándose sin vergüenza de lo que representaba la guerrilla para los colombianos, una plaga que salía en cualquier momento a acabar con lo que fuera (acuérdense de las pescas milagrosas, hasta los más pobres que iban en buses escalera eran secuestrados y extorsionados).
Deben averiguar un poco sobre cuanto costaba una hectárea de tierra antes y después de Uribe, en lugares como, por poner un solo ejemplo, Urabá.
Miren por ejemplo, la inflación en enero de 1996 era de 20,25 y se mantuvo en ese promedio hasta que con la crisis que empezó en 1998 (espero que conozcan de esa crisis) se redujo la demanda, llegando así en mayo de 1999 a un solo dígito, pero como teníamos una fuerte tendencia inflacionista en mayo de 2000 volvió a 10. Sin embargo, el país comenzó a estabilizarse y ya no se veían los efectos inflacionarios producidos por el exceso de circulante proveniente del narcotráfico, por lo que en agosto de 2002 ya era de 5.98 y a agosto de 2009 marcó 3.13, claro está que también influye la desaceleración de la economía, la cual deprime considerablemente la demanda. Pero es bueno que se acuerden de ese 20,25 y lo comparen con un 3.13 son tan distantes que no merecen un detallado análisis y no dan lugar a subjetividades.
Otra cosa que podemos mirar es, cómo se devaluaba el peso, por ejemplo a cierre de 2000 la TRM era de $1.976, 72 más alta que a hoy y a cierre de enero de 2003 era $2.926, 46 $1.000 más alta que hoy, siempre devaluando. Ahora los expertos hablan de la imposibilidad de que se devalúe de manera representativa el peso frente al dólar por lo menos en lo que queda de este año, por la inestabilidad de la encomia estadunidense y la estable estructura de la economía colombiana, ojo estructura, ahora sale un apasionado a decir que yo dije que somos una potencia económica mundial, como si no los conociera. Pero ese pequeño detallito sirve para saber que un carro que en enero de 2003 costaba USD 10.000 en USA llegaba a Colombia con un costo de $29’260.000, hoy un carro de ese mismo costo llega a $19’240.000, eso $10’020.000 siempre ayudan mucho a mejorar la calidad de vida y lo mejor casi 7 años después, ¿usted anti-uribista se lo imaginó?. Yo se que afecta a los exportadores, pero es absurdo ir encontrar del fortalecimiento de la moneda, es la realidad y es una realidad positiva que tendrá que irse ajustando.
En conclusión, no hay nadie perfecto, Uribe no es perfecto por lo tanto yo no soy uribista, pero si ponemos en una balanza lo bueno y lo malo de este señor, sobresale lo bueno, yo soy consciente de las cosas malas, de sus inadecuadas posiciones frente a los periodistas, frente a las ONG defensoras de los derechos humanos, su clientelismo buscando aprobar el referendo reeleccionista, los enfrentamientos con las cortes, los problemas por abusos de las fuerzas militares, el descontrol del DAS, el apoyo irrestricto a funcionarios que a la postre terminaron vinculados con grupos paramilitares, etc., etc., etc., yo lo sé, pero me parece absurdo pensar que el culpable de los secuestros de las FARC es el presidente o que este país estuviera mejor si nos hubiera seguido gobernando el payaso de Pastrana, el sin vergüenza de Samper o el inconsciente de Gaviria, yo no sé porque ellos no le toman en arriendo cada uno un cuarto a Belisario en Barichara y nos dejan de joder.
Piénsenlo, con calma y sin rabia… se trata de paz y amor. Ah y se me olvidaba contarles, tampoco soy fan de Juanes.
25 de septiembre de 2009
18 de septiembre de 2009
Más, más y más...
Vivimos un mundo cada vez más egoísta pero con la singularidad de vivir en función de los otros.
Parecemos maquinas fotocopiadoras, unos con ganas de ser a color otros resignados a ser en blanco y negro. Quizá muchas de esas cosas que queremos imitar hagan parte de la cultura, quizá de la sociedad de consumo pero lo más seguro es que hacen parte de una falta de identidad generalizada.
Ayer precisamente estaba conversando con mi esposa sobre todo lo que ha cambiando con el tiempo, cosas que antes eran vistas como atributos o valores hoy son miradas como posiciones anticuadas o anti-progresistas, quizá cobardes y conformistas.
Solo hasta hace unos 10 años las personas ahorraban (y esto era un valor) para comprarse un carro, una vez tenían un dinero compraban el que podían y lo iban cambiando con el tiempo, un carro con 5 años de uso era un carro nuevo, hoy un carro con 3 años de uso es un carro usado que perdió la garantía, la gente ahora ahorran para el 10% del valor del automóvil soñado y empeñan su sueldo con cuotas altísimas, pero lo importante es mostrar el progreso, un progreso que solo se respalda con deudas. Eso solo por hablar de la necesidad de aparentar, que al fin y al cabo por fortuna solo produce angustias.
Pero lo crítico es la crisis de valores, cada vez más el hecho de tener un mente abierta termina siendo un tema de irresponsabilidad, hoy de salud pública o púbica mejor. La promiscuidad es algo de elección personal totalmente respetable y por qué no, admirable, lo que no es respetable ni admirable es la irresponsabilidad sobre la salud, sexo sin protección que transmite muerte y en el peor de los casos transforma a seres humanos en muertos vivientes.
Cargamos ese peso solo por estar inmersos en una sociedad que invita permanentemente a la inmediatez obviando la importancia de la reflexión. Adolecentes embarazadas claramente abortando o teniendo hijos no deseados, sin poder disfrutar su juventud, arriesgando sus vidas y todo porque nacieron en un hogar donde sus padres solo piensan en cómo manejar las “finanzas” y la imagen, el papá de esta muerta viviente preñada, está pensando en que su jefe es un cerdo , en como cambiar el carro viejo 2006 o como comprar un apartamento mejor ubicado porque seguramente eso le ayudará a conseguir mejores cosas, la mamá de esta púber futura madre piensa en agradarse las tetas , levantarse el culo para poder ponerse todo lo que se ponen las niñas 20 años menores que ella, esa mamá que cada vez más quiere parecerse a su hija pero que por cosas de la vida la menopausia con su infertilidad le resecó la piel, le aumentó la temperatura corporal, pero esto paradójicamente, la hace sentir como un volcán que se alimenta de las miradas morbosas de hombres y mujeres… mientras que su hija no alcanzó a entender el peligro que representa ser un volcán en erupción a los 16 años y se rindió ante las miradas morbosas de sus admiradores que solo quisieron sentir el ardor de su lava incandescente y nada decente, pero con la desdicha de no contar con la infertilidad reseca de su madre.
Y esto nada tiene que ver con el estrato, nada tiene que ver con el nivel cultural, de una u otra forma todos están queriendo tener más y verse mejor que el resto, de ahí los prestamos gota a gota para los que no tienen acceso al sistema bancario, de ahí las clínicas de cirugía plásticas de garaje para las que no tiene acceso a un cirujano de verdad, de ahí la proliferación de gimnasios en los más paupérrimos sectores de las urbes y esto no es por salud, porque por salud se puede salir a caminar, todo esto es por estar pensando en todo, menos en el bienestar propio y de la familia.
Y a veces nos preguntamos por qué en los noticieros solo hablan de: niños maltratados, adolecentes embarazadas, muertes de mujeres en clínicas de estética ilegales, robos a bancos, robos de carros, cada vez se incrementan los casos de víctimas del VIH, cada vez más adictos a la heroína, cada vez más adolecentes muertos en riñas en colegios o en disputas entre pandillas… al final todos luchan por tener más… más cosas, más plata, más sexo, mejor cuerpo, más hombres o mujeres, más poder, siempre quieren más, más y más. Dejando a su paso solo más dolor, más muerte, más violencia, más infelicidad…
Y mientras tanto usted señor lector pensando que la solución es Uribe o que la perdición es Uribe, cuando no somos más que una sociedad enferma en busca de culpables de nuestra infelicidad, cuando en realidad somos unas maquinas increíblemente perfectas para producir cosas que no sirven como: odio, envidia, codicia, egoísmo, prepotencia, engaño, vanidad y sobre todo soberbia, este es el país donde cada uno es dueño de la verdad y la razón absoluta.
Y no hace falta sino mirar a través del sucio cristal para darnos cuenta de que vivimos unos sobre otros, cada vez somos más y la tierra es la misma, cada hay más edificios, más carreteras, más autopistas, más carros, más, más, más… y más, pero a la vez menos tiempo para pensar, disfrutar y ver lo poco que queda del verde paisaje que hasta hace solo unos 5 siglos nos invadía.
Lo mejor será comenzar a ver todo en blanco y negro para no sentir el dolor de ver morir el verde de la naturaleza y acostumbrarse a la nostalgia que los grises producen porque será nostálgico recordar que pudimos ser una sociedad feliz y decidimos ser infelices en la búsqueda incesante de ser más y tener más que los otros.
Por ahora toca disfrutar la fortuna de poder ver unos destellos verdes que sobresalen por encima de las altas columnas de cemento que nos albergan como carpetas en un archivador, mientras el progreso o el desplazamiento forzado, llenan estas montañas de fríos ladrillos rojizos…
¿Y a usted qué más le hace falta?
Parecemos maquinas fotocopiadoras, unos con ganas de ser a color otros resignados a ser en blanco y negro. Quizá muchas de esas cosas que queremos imitar hagan parte de la cultura, quizá de la sociedad de consumo pero lo más seguro es que hacen parte de una falta de identidad generalizada.
Ayer precisamente estaba conversando con mi esposa sobre todo lo que ha cambiando con el tiempo, cosas que antes eran vistas como atributos o valores hoy son miradas como posiciones anticuadas o anti-progresistas, quizá cobardes y conformistas.
Solo hasta hace unos 10 años las personas ahorraban (y esto era un valor) para comprarse un carro, una vez tenían un dinero compraban el que podían y lo iban cambiando con el tiempo, un carro con 5 años de uso era un carro nuevo, hoy un carro con 3 años de uso es un carro usado que perdió la garantía, la gente ahora ahorran para el 10% del valor del automóvil soñado y empeñan su sueldo con cuotas altísimas, pero lo importante es mostrar el progreso, un progreso que solo se respalda con deudas. Eso solo por hablar de la necesidad de aparentar, que al fin y al cabo por fortuna solo produce angustias.
Pero lo crítico es la crisis de valores, cada vez más el hecho de tener un mente abierta termina siendo un tema de irresponsabilidad, hoy de salud pública o púbica mejor. La promiscuidad es algo de elección personal totalmente respetable y por qué no, admirable, lo que no es respetable ni admirable es la irresponsabilidad sobre la salud, sexo sin protección que transmite muerte y en el peor de los casos transforma a seres humanos en muertos vivientes.
Cargamos ese peso solo por estar inmersos en una sociedad que invita permanentemente a la inmediatez obviando la importancia de la reflexión. Adolecentes embarazadas claramente abortando o teniendo hijos no deseados, sin poder disfrutar su juventud, arriesgando sus vidas y todo porque nacieron en un hogar donde sus padres solo piensan en cómo manejar las “finanzas” y la imagen, el papá de esta muerta viviente preñada, está pensando en que su jefe es un cerdo , en como cambiar el carro viejo 2006 o como comprar un apartamento mejor ubicado porque seguramente eso le ayudará a conseguir mejores cosas, la mamá de esta púber futura madre piensa en agradarse las tetas , levantarse el culo para poder ponerse todo lo que se ponen las niñas 20 años menores que ella, esa mamá que cada vez más quiere parecerse a su hija pero que por cosas de la vida la menopausia con su infertilidad le resecó la piel, le aumentó la temperatura corporal, pero esto paradójicamente, la hace sentir como un volcán que se alimenta de las miradas morbosas de hombres y mujeres… mientras que su hija no alcanzó a entender el peligro que representa ser un volcán en erupción a los 16 años y se rindió ante las miradas morbosas de sus admiradores que solo quisieron sentir el ardor de su lava incandescente y nada decente, pero con la desdicha de no contar con la infertilidad reseca de su madre.
Y esto nada tiene que ver con el estrato, nada tiene que ver con el nivel cultural, de una u otra forma todos están queriendo tener más y verse mejor que el resto, de ahí los prestamos gota a gota para los que no tienen acceso al sistema bancario, de ahí las clínicas de cirugía plásticas de garaje para las que no tiene acceso a un cirujano de verdad, de ahí la proliferación de gimnasios en los más paupérrimos sectores de las urbes y esto no es por salud, porque por salud se puede salir a caminar, todo esto es por estar pensando en todo, menos en el bienestar propio y de la familia.
Y a veces nos preguntamos por qué en los noticieros solo hablan de: niños maltratados, adolecentes embarazadas, muertes de mujeres en clínicas de estética ilegales, robos a bancos, robos de carros, cada vez se incrementan los casos de víctimas del VIH, cada vez más adictos a la heroína, cada vez más adolecentes muertos en riñas en colegios o en disputas entre pandillas… al final todos luchan por tener más… más cosas, más plata, más sexo, mejor cuerpo, más hombres o mujeres, más poder, siempre quieren más, más y más. Dejando a su paso solo más dolor, más muerte, más violencia, más infelicidad…
Y mientras tanto usted señor lector pensando que la solución es Uribe o que la perdición es Uribe, cuando no somos más que una sociedad enferma en busca de culpables de nuestra infelicidad, cuando en realidad somos unas maquinas increíblemente perfectas para producir cosas que no sirven como: odio, envidia, codicia, egoísmo, prepotencia, engaño, vanidad y sobre todo soberbia, este es el país donde cada uno es dueño de la verdad y la razón absoluta.
Y no hace falta sino mirar a través del sucio cristal para darnos cuenta de que vivimos unos sobre otros, cada vez somos más y la tierra es la misma, cada hay más edificios, más carreteras, más autopistas, más carros, más, más, más… y más, pero a la vez menos tiempo para pensar, disfrutar y ver lo poco que queda del verde paisaje que hasta hace solo unos 5 siglos nos invadía.
Lo mejor será comenzar a ver todo en blanco y negro para no sentir el dolor de ver morir el verde de la naturaleza y acostumbrarse a la nostalgia que los grises producen porque será nostálgico recordar que pudimos ser una sociedad feliz y decidimos ser infelices en la búsqueda incesante de ser más y tener más que los otros.
Por ahora toca disfrutar la fortuna de poder ver unos destellos verdes que sobresalen por encima de las altas columnas de cemento que nos albergan como carpetas en un archivador, mientras el progreso o el desplazamiento forzado, llenan estas montañas de fríos ladrillos rojizos…
¿Y a usted qué más le hace falta?
Suscribirse a:
Entradas (Atom)