AIS (Andrés Indigno Ser)

Yo siempre hago un esfuerzo por tomar una posición de centro, tratar de analizar los pros y los contras de cada situación, pero en el caso del AIS, no encuentro el Pro.

Particularmente como lo dije en el artículo ¿Por quién –NO- debo votar? Publicado en www.revistaclaroscuro.com pienso que de los aspirantes a la presidencia de Colombia que gozan de popularidad el único que no es una opción, es Andrés Felipe Arias, sin entrar en apasionamientos y tratando de ser lo más justo como respetuoso sea posible, el adjetivo más apropiado para este personaje es “payaso”. Es más me ha hecho pensar en la posibilidad de ser anti-uribista después de haber renegado tanto al respecto, porque para mí es inconcebible que una persona inteligente pueda reconocer algo bueno en este personajillo.

Sin embargo, lo que quiero hacer ver sobre el problema AIS, que según Arias, es algo menor, que no es su responsabilidad sino de los que fueron ventajosos a la hora de acceder a estos subsidios, es otra más de sus recurrente estupideces. Lo quiero ilustrar con un ejemplo, si a una persona lo contratan para cuidar una casa y deja la puerta abierta para que entren y la saqueen, ¿de quién es la responsabilidad de que hayan robado?, pues del que los dejo entrar, ¿Quiénes son los rateros?, los que entraron y robaron. Pero es absurdo que él piense que no es su responsabilidad, pero lo peor es que tiene que ser uno muy idiota para decirlo.

Me llama la atención la posición de Uribe, los bancos cada vez ganan más y por supuestos las utilidades son para ellos, acceder a un crédito es casi imposible, es decir, un pequeño agricultor que no demuestre tener las garantías suficientes para respaldar un crédito no le es otorgado, independientemente de que su proyecto productivo sea rentable y sostenible, nadie mira esto, solo miran las garantías, es decir, miran qué le pueden quitar sino paga. En ese caso ni el gobierno, ni el banco corren el más mínimo riesgo, es decir, a nadie le importa que este pequeño agricultor genere: empleo y utilidades, además de enriquecer al banco a través de pago de intereses anticipados y por supuesto tiene que devolver el capital.

En conclusión, las políticas de este gobierno, en lugar de buscar la forma de apoyar a los pobres para generar riqueza a través de otorgar créditos blandos, prefieren, regalarle plata a los ricos. Lo mínimo que en un país con los problemas de distribución de la riqueza que uno esperaría en un caso extremo es que le regalen a los pobres y les den créditos blandos a los ricos. Pero acá les regalan a los ricos y a los pobres los dejan morir del hambre.